23 abr 2015

"La naturaleza nunca hace nada sin motivo" Aristóteles


La primavera vuelve una vez más con coloridas flores, brotes verdes, insectos y aves que empiezan una incesante actividad... como la de las personas hortelanas que desbordadas de labores ponen semillas aquí, plantones allá, trasplantes, esquejes, riegos y sobre todo mucha ilusión para que las plantas crezcan contentas.

Fijaros por ejemplo en la familia de Cebollinos de la foto... ansían abrir sus flores tanto como tú cumplir tus proyectos. Fuerza y energía que podemos percibir observando una maceta, un huertecillo, el bosque o, en definitiva, la Naturaleza... ¡qué placer fundirnos con ella cultivando bonitas y sabrosas hortalizas!
Las plantas se muestran ante nosotros tal como son pero sin detener su desarollo. 
Por eso, cada momento del año en la Naturaleza es único: si te lo pierdes no puedes volver atrás. Tan reconfortante es recolectar una lechuga al comienzo del verano como ver salir sus primeras hojas en primavera.

El cebollino es rico envitamina A, B y C. Al igual que la cebolla (son de la misma familia) contiene alicina, un potente agente antiséptico y desinfectante. Puede usarse vía tópica para dicho fín.